
Jesús le respondió: —¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que esta en el cielo.Ahora te digo yo: —Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del Reino de los Cielos; lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo. Y les mandó a los discípulos que no dijesen a nadie que él era el Mesías
Me llena de alegría y esperanza la frase:...."y el poder del infierno no la derrotará"
ResponderEliminarLo digo por esos "mensajeros no precisamente divinos" que tratan de fastidiar la estancia del Papa entre la juventud que por cierto contagian y emocionan con su entusiasmo y su fe...en estas ocasiones me siento más orgullosa que nunca de ser creyente.