Ayer tarde nos juntamos unas cuantas personas en el salon parroquial. Vino una religiosa Hija de la Cruz, Maria Dolores, desde Renteria, para animarnos a conocer y apoyar el espiritu de esta Congregación.
Aunque casi todas las que estaban reunidas la conocian, Mª Dolores nos metió vigor y sabia en el animo para potenciar lo que podamos en ese apoyo. Sobre todo en la linea Vocacional.
¡Qué bien nos hizo, ademas, el visionar una experiencia de 30 jovenes que hicieron este verano en Burkina Fasso!. ¡Digno de imitarles!.
La tarde se termino con unos dulces y licores mientras se convivia. Luego una eucaristia.
La charla estuvo muy bien y me impresionó el testimonio de los jóvenes voluntarios en Burkina Fasso.
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